Cuando aparece una infección en un diente, el dolor puede volverse tan intenso que resulta difícil comer, dormir o incluso concentrarse. En estos casos, el tratamiento de elección suele ser la endodoncia con infección, un procedimiento que permite eliminar las bacterias del interior del diente y conservar su estructura natural.
Sin embargo, muchos pacientes nos preguntan en consulta si es posible realizar una endodoncia con infección activa, o si conviene esperar a que la inflamación desaparezca antes de intervenir.
Desde la Clínica Dental Nuño Gil, expertos en endodoncia en Burgos, queremos aclarar esta duda y explicar por qué, en la mayoría de las situaciones, la endodoncia con infección no solo se puede realizar, sino que es el tratamiento más eficaz para resolver el problema y aliviar el dolor.
¿Por qué se produce la infección dental?
La infección se produce cuando las bacterias penetran hasta el interior del diente, normalmente a causa de una caries profunda, un golpe o una restauración antigua que ha perdido su sellado. Cuando las bacterias alcanzan el nervio dental, este se inflama y puede necrosarse, generando una infección que se extienda hacia la raíz y los tejidos circundantes.
Los síntomas más habituales son:
- Dolor intenso y continuo que puede aumentar al masticar.
- Sensibilidad al frío o al calor.
- Hinchazón en la encía o la cara.
- Enrojecimiento o inflamación en la zona afectada.
- Presencia de un flemón o bulto con pus (absceso).
- En casos más graves, fiebre o malestar general.
Si presentas alguno de estos síntomas es importante acudir lo antes posible a tu odontólogo en Burgos para que evalúe tu caso y determine si es necesario realizar una endodoncia con infección, para evitar que se propague y comprometa el diente.
¿Se puede realizar una endodoncia con infección activa?

La respuesta es sí, se puede hacer una endodoncia con infección. De hecho, es la mejor forma de eliminarla por completo. Sin embargo, cuando la infección es muy aguda y existe mucha inflamación, el odontólogo puede pautar un tratamiento previo con antibióticos o antiinflamatorios para reducir los síntomas antes de realizar la endodoncia con infección. Una vez controlado el cuadro inicial, la intervención es totalmente segura.
Este procedimiento consta de los siguientes pasos:
1. Diagnóstico y anestesia local
Evaluamos el estado del diente mediante radiografías digitales y pruebas de sensibilidad. A continuación, aplicamos anestesia local para garantizar que el tratamiento de endodoncia con infección sea cómodo y sin dolor.
2. Aislamiento del diente
Colocamos un dique de goma para aislar la pieza y mantenerla libre de saliva o bacterias durante todo el procedimiento de endodoncia con infección.
3. Limpieza y desinfección de los conductos
Utilizamos microscopio dental y sistemas rotatorios de alta precisión que permiten eliminar el tejido dañado y desinfectar a fondo el interior del diente, eliminando completamente la infección.
4. Sellado hermético
Una vez limpios los conductos, se rellenan con materiales biocompatibles para impedir que las bacterias vuelvan a entrar y provocar una nueva infección.
5. Restauración del diente
En la mayoría de los casos, la endodoncia con infección se completa en una o dos sesiones. Finalmente, se coloca una restauración o una corona dental que refuerza la pieza y le devuelve su función y estética natural.
¿Por qué no conviene esperar a que desaparezca la infección?
Esperar a que la infección remita sin tratar el origen del problema puede agravar la situación. Los antibióticos solo actúan de forma temporal y no eliminan las bacterias que se encuentran dentro del diente.
Si no se realiza la endodoncia con infección, el proceso infeccioso puede avanzar, causar la pérdida del diente e incluso afectar al hueso o a otras zonas de la boca.
Cuidados después de una endodoncia con infección
Tras una endodoncia con infección, es normal notar una ligera sensibilidad durante unos días. Para favorecer una buena recuperación, te recomendamos seguir estas pautas:
- Seguir todas las recomendaciones del odontólogo sobre medicación y cuidados específicos.
- Evita masticar por el lado tratado hasta que el diente esté completamente restaurado.
- Mantén una buena higiene oral, cepillando suavemente la zona y usando hilo o cepillos interdentales.
- Acude a las revisiones programadas para controlar la evolución del tratamiento.
Con una correcta atención posterior, el diente tratado mediante endodoncia con infección puede conservarse durante muchos años y funcionar igual que una pieza natural.
Si crees que puedes tener infección dental, en nuestra clínica dental en Burgos contamos con especialistas en endodoncia para tratar tu diente afectado con una endodoncia con infección segura, rápida y efectiva. ¡Pide cita ahora!
